Reproductor

miércoles, 27 de noviembre de 2013

Capitulo 4: Mientras yo esté aquí te protegeré

—¡Ah!—gritó una voz femenina, despertándome de mi placentero sueño.

—¿¡Qué ocurre!?—exclamé sobresaltada por el grito de la voz femenina.

—¿Qué te ha ocurrido en el pie?—preguntó temblando señalando mi pie derecho. Mierda, estoy jodida, tenía que pensar en una escusa convincente y rápido.

—¡Ah! Esto... Yo... Me lo hice en las prácticas—respondí con nerviosismo, esperando que no se diera cuenta cuenta del engaño.

—Ah—suspiró aliviada—. Menos mal, pensé que era de otra cosa—dijo ya más tranquila. No me lo podía creer, ¡se lo había tragado! Aunque, no debo preocuparme por eso ahora, teng

—Tengo una propuesta que hacerte...—la sirvienta me miró extrañada ante el comentario—. ¿Podrías cubrirme? Solo será por unas horas—pregunté suplicante, deseaba con todas mis fuerzas que fuera una respuesta positiva.

—¡Pero princesa, eso es muy peligroso!—exclamó la joven eriza de ojos rubí

—Por favor, haré lo que sea.

—¿Lo que sea?—sonreí con felicidad, aunque a la vez tenía miedo por el tono que lo decía

—Está bien princesa, a cambio quiero que vaya a visitar a mi hermano, me preocupa mucho, no ha querido saber nada de nadie... ¿Qué dices? ¿Trato hecho?—la eriza verde de ojos rojos estrechó su mano en señal de cerrar el trato. Dude por unos segundos... Pero al final acabe aceptando, sabía que ya no había vuelta atrás y que era peligroso, pero, quería volver a ver a Sonic... Mi corazón late muy fuerte cuando pienso en sólo verle, ¡tengo que verlo de nuevo!

—¡Genial! Visita esta dirección, di que vienes de parte de Lucy—dijo alegremente entregándome un papel con la dirección. Fui a coger la cuerda, la ate nuevamente al bordillo, estaba a punto de bajar pero Lucy me interrumpió.

—Alteza no puede ir así—mire hacia bajo y vi que estaba todavía en pijama y también despeinada.

—Tome esto. -dijo la muchacha entregándome un vestido blanco con unos tacones y felpa a juego. Minutos después, terminamos de arreglarme.

—Te ves muy linda majestad.



—Muchas gracias—agradecí por el alago por parte de Lucy

—Váyase rápido antes de que vengan el resto de la servidumbre. -dijo empujándome hacia el balcón. Me encamine hacia la atadura de la cuerda y comencé a bajar con delicadeza hasta notar el suelo bajo mis pies. En ese instante, corrí hasta más no poder con cuidado de no caerme con los zapatos y de no dañarme el pie. Minutos después, cuando noté que estaba lo suficientemente lejos de palacio, apoyé mi brazo en una farola para descansar un poco y normalizar mi acelerada respiración. Escasos segundos más tarde me incorporé y comencé a caminar buscando la dirección que estaba garabateada en la hoja. Pude notar las miradas pervertidas y lujuriosas de muchos muchachos, cosa que no le di mucha importancia. Después de preguntar a la gente hacia dónde tenía que ir, llegue a unos pisos en bastante mal estado en donde la única forma de entrar era por medio de un callejón sin salida, cosa que no me inspiraba mucha confianza.
Entré, con la esperanza de que nada malo me ocurriera, pero, para mi mala suerte, un grupo de chicos me acorralaron en ese hueco.

—Vaya, vaya, vaya... hemos tenido mucha suerte, no suelen pasar muchas chicas lindas por aquí—sonrió pícaro viéndome de arriba a bajo.

—Además, se ve muy deliciosa—dijo otro chico relamiéndose con lujuria. Corrí hacia la escalera iniciando una persecución que no duró mucho ya que ellos eran muchísimo más rápidos que yo.

—Es hora de jugar. -dijo atrevido mientras me cogía de las muñecas. Intentaba con todas mis fuerzas escapar de su agarre, pero los intentos fueron inútiles. El joven lamía mi cuello mientras tocaba mi pierna hasta que una voz masculina interrumpió en ese instante.

—No sabéis que a las damas se les debe tratar con educación ¿No? Yo me encargaré de que lo aprendáis—dijo con frialdad impartiendo miedo en el ambiente.

—Maldición, ¡retirada!—exclamó el chico que me tenía sujeta mientras se iban corriendo.

—Gallinas, y ellos se consideran hombres—farfulló, enfadado por el acto que acababa de presenciar. El erizo se acercó lentamente a mí, retrocedí por miedo a que él me hiciera daño también.

—No tengas miedo, yo sí sé respetar a una mujer, no como esos degenerados—el erizo verde me extendió su mano, cuestioné unos segundos en mi cabeza hasta que al final la cogí.

—Soy Scourge the hedgehog—acto seguido me eché en sus brazos sin pensarlo mientras lágrimas brotaban de mis ojos, en verdad tenía mucho miedo

—No te preocupes, mientras yo esté aquí te protegeré—el peli-verde correspondió mi abrazo mientras acariciaba mi cabello


                       CONTINUARA...

2 comentarios:

  1. Que fuerte que fuerte scourge sale de bueno O.O
    Sofi-tengo miedo
    Almu-*se desmalla*
    Marta-onee-chan!
    Lidia-pobrecilla....yo tengo a michel-kun para protegerme!
    Laura-nls vemos cris-chan
    Michel-jejeje*sonrojado con una mano detrás de la cabeza*

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. See, no quería hacer como los otros blog que lo ponían de malo, (la gran mayoría) por eso decidí ponerlo de bueno -w- pero eso no significa que no haya escenas perver ewe
      ¡Qué tiernos! >w<
      Arigatou por comentar, cuidate, sayonnara.

      Eliminar