Aunque antes quiero dar un par de avisos, sobre las encuestas que hice, como en el especial de pareja quedó empate entre Sonamy y Shadamy (Porque no me sorprende) pues voy ha hacer el siguiente capítulo más largo además de que va ha estar lleno de muchas sorpresas, sin más que decir les dejo que comiencen con la historia...
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Era un sábado por la mañana, mis ojos se abrieron pesadamente por culpa del sol. Me levanté perezosamente y miré el calendario, era veinte y siete de Enero, por alguna razón esa fecha la recuerdo como algo importante, pero aún no sé porque. Decidí quitarme esos pensamientos de la cabeza para ir al baño ha hacer mis necesidades básicas. Unos minutos después salí del aseo y fui a la cocina para prepararme el desayuno, un delicioso zumo de naranja junto con un yogurt natural, sin dudar un segundo más me senté. Estaba a punto de comenzar a comer cuando suena el teléfono, me levanté y dejé mi comida para seguidamente coger el aparato.-Hola.-Saludé.-Buenos días IA-chan.-Dijo desde el otro lado de la línea. Reconocí esa voz al instante, mí corazón comenzó a latir con fuerza mientras que la sangre subía a mis mejillas.-¿Yuuma-kun?-Pregunté nerviosa.-El mismo. Oye ¿Tienes algo planeado hoy? -Me interrogó. Mí cara parecía un tomate y parecía que se me iba a salir el corazón del pecho.-No ¿Por qué? -Le respondí.-Me gustaría llevarte a un lugar especial por el día tan importante que es hoy ¿Qué dices?-No le permití decir ni una palabra más y le contesté un por supuesto.-Vale, paso a recogerte en media hora.-La llamada terminó y fue así como corrí a toda velocidad hacia la mesa del comedor y comer como si no hubiese un mañana. Unos segundos después volé hacia mi cuarto y busqué algo adecuado para ponerme. Cinco minutos más tarde y aún no encontraba nada hasta que vi un precioso conjunto de una falda morada, camiseta negra de tirantes con escote en forma de corazón con los bordes morados, unas mangas negras con los bordes de arriba también color morado, un calcetín corto y otro largo con los mismos tonos y una liga color negra.
Me lo puse algo apurada pues ya se estaba acercando la hora en que vería a Yuma-kun, mí corazón se acelera con el simple hecho de pensar en él.
En cuanto al cabello, lo mantuve igual que siempre; suelto y con dos pequeñas trenzas.
El tiempo pasaba y por fin había sonado el timbre, abrí la puerta en menos que canta un gallo para luego parecer un volcán en erupción. Yuma traía una camiseta manga corta color verde conjuntado con una corbata de cuadros rosas y blancos, una capucha blanca con los bordes de la capucha negros y rayas negras en las mangas mientras que en el pecho tenía un corazón rosa y negro con pinchos, un gorro color verde con algunas chapas, unos vaqueros negros, y, por último, unas deportivas color negro. Si tuviera que poner nota a la belleza del uno al diez le doy un diez mil. Estaba tan absorta en mis pensamientos que no presté atención a lo que Yuma decía.
-¿IA-chan? -Cuestionó extrañado. Salí fuera de mi imaginación y asentí.-¿Nos vamos ya?-Volví a asentir nuevamente y salimos de mi casa camino del lugar especial al cual el joven de pelo rosado quería llevarme. En el rato que estuvimos caminando ninguno de los dos habló, miré un poco de reojo recibiendo una mirada por parte de él que inmediatamente fue interrumpida por nuestra vergüenza.
Un cuarto de hora más tarde, llegamos a un precioso espacio en donde había árboles de cerezo donde se podía ver con claridad como caían los cerezos en flor, simplemente era espectacular.
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-Este es el momento, es ahora o nunca.-Pensé. Me acerqué con lentitud y cuando estaba lo suficientemente cerca cogí su mano y me puse a correr. Miré hacia atrás para poder contemplar a una chica de cabello blanco con reflejos rosados y ojos morados oscuros sonrojada y sonriendo, esa era IA. Corrimos durante un largo rato hasta que decidimos descansar, nos sentamos en el pasto mientras observábamos los cerezos en flor y entablábamos conversación.-Te estarás preguntando el porque te he llevado aquí.-Alegué a lo que la chica respondió con sí.-Aquí es donde te vi por primera vez, capturaste mi atención desde aquel entonces, es por eso que...-Paré un momento para respirar y tragar saliva.-Te amo.-La confesión fue cerrada con un beso en los labios de la muchacha. A ella no le molestos en absoluto, es más, me correspondió. Unos segundos después tuvimos que separarnos por la falta de aire. Ambos nos miramos a los ojos, perdidos en los orbes del otro.-Yo también te amo Yuma.-Esta vez fui yo el besado para luego separarme unos instantes de ella.-Feliz cumpleaños IA-chan.-La joven quedó sorprendida por la frase recién realizada.-Así que era eso, ya decía yo que era algo importante.-Añadiste rascándote la nuca en signo de torpeza.-Eres tan olvidadiza.-Pero soy tu olvidadiza.-Fue así como sellamos nuestro pacto de amor con un tierno beso, la luna y las estrellas fueron testigo de ello.
FIN
No se olviden de comentar, recuerden que es mi paga.
Y bueno, que decir de esta hermosa Vocaloid, es que simplemente me encanta, su estilo rebelde, su apariencia, en general todo. Espero que esta pequeña Vocaloid siga por más tiempo, I love IA
Aquí a bajo os dejo las vestimentas que llevaban por si no lo comprendieron bien.
